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HERÁLDICAY NUMISMÁTICA

El último escudo de anverso en una moneda hispánica.

 

En 1762 se baten las últimas monedas hispánicas con el escudo de armas completo en el anverso.

 

Diseño nacido en tiempos del reinado de los Reyes Católicos con la Pragmática de Medina del Campo de 1497 (1), que se modificó sustancialmente en el reinado de Felipe II con la Pragmática de la Nueva Estampa de 1566, nuevo diseño con las armas heredadas de Felipe el Hermoso (2), al que se le añade, a partir de 1586, el escusón portugués durante un siglo, tras la adhesión a la Corona de dicho reino por herencia de Felipe II (3).

(1) 8 reales a nombre de los Reyes Católicos, Sevilla.

(2) 8 reales de Felipe II, Lima.

(3) 8 reales de Felipe II, Real Ingenio de Segovia. 1586.

En el s. XVIII, con la llegada de la nueva dinastía, aparecerá el escusón de los Borbones y modificación del diseño (4).

(4) 8 reales de Felipe V, Madrid. 1711.

A este último diseño de Felipe V añadirá Carlos III las armas de Parma y Toscana, que perdurará en las monedas de oro hasta el reinado de Isabel II (5), pero en plata sólo lo tenemos en las emisiones de 1762 en Madrid y Sevilla, y que supondrá un cambio sustancial en la disposición del resto de armas en el escudo, tomando mayor protagonismo las de Castilla y León con el escusón borbónico en el centro.

(5) 100 reales de Isabel II, Barcelona.1856.

A tener en cuenta para entender esta emisión de 1762 serán las Ordenanzas promulgadas en 1728 y 1730, pues se trataba de conseguir un aumento en la calidad de las emisiones de moneda regulando el corte de los cospeles con máquinas cortadoras, la acuñación del canto con cerrillas y la acuñación de las monedas en presas de volante o balancín. Esta disposición no modificará el diseño del escudo que estamos tratando, aunque sí el de las monedas americanas, con la irrupción del “columnario de mundos y mares” (6). Pero sí afecta a la labranza de estas piezas de 1762, puesto que están acuñadas a volante y labrado el canto con un diseño de hojas de laurel.

(6) 8 reales de Felipe V, México. 1732.

Por último, la Pragmática de 22 de mayo de 1772 acabaría con el escudo en el anverso en las monedas de plata para imponer el busto del monarca (7).

(7) 8 reales de Carlos III, Madrid. 1772.

LAS ARMAS DEL ÚLTIMO ESCUDO DE ANVERSO.

(8) 8 reales de Carlos III, Sevilla. 1762.

(9) Desglose visual:

 

Empezamos con las armas heredadas de los Reyes Católicos, por Fernando el Católico tenemos Aragón (de oro y cuatro palos de gules) y Sicilia (partido y flanqueado, jefe y puntas de oro y cuatro palos de gules, flancos de plata y un águila de sable, coronada de oro, picada y membrada de gules), por parte de Isabel la Católica, Castilla (de gules, y un castillo de oro, almenado de tres almenas, con tres homenajes, el de en medio mayor y cada homenaje también con tres almenas, mamposteado de sable y aclarado de azur), León (de plata y un león de púrpura, coronado de oro, lenguado y armado de lo mismo) y Granada (de plata y una granada al natural, rajada de gules, tallada y hojada de dos hojas de sinople).

 

De parte de Felipe el Hermoso heredaría la monarquía hispánica, añadidas por la Pragmática de la Nueva Estampa, las siguientes armas: Por parte de su padre, el emperador Maximiliano I, Austria (de gules y una faja de plata) y Tirol (partido de plata y un águila de gules, coronada, picada y membrada de oro, cargado el pecho de un creciente trebolado de lo mismo) y por parte de su madre, María de Borgoña, Borgoña antiguo (bandado de oro y de azur con bordura de gules), Borgoña moderno (de azur, sembrado de flores de lis de oro y bordura camponada, cantonada de plata y gules), Brabante (de sable y un león de oro, coronado de lo mismo, lenguado y armado de gules) y Flandes (de oro y un león de sable, lenguado y armado de gules).

 

Con Felipe V se incorporará el escusón de los Borbones (en gules tres lises).

 

Y Carlos III incorporará Parma-Farnesio (de oro y seis flores de lis de azur distribuidas de arriba a abajo, una, dos, dos y una) y Toscana-Médicis (de oro y cinco roeles de gules distribuidos en el campo de arriba a abajo, dos, dos y uno, un tortillo de azur en jefe cargado de tres flores de lis de oro), pues Carlos, por herencia de su madre Isabel de Farnesio, fue duque de Parma y Plasencia.

 

Estas armas representaban, en origen, territorios gobernados por la monarquía hispánica, aunque en 1762 muchos de ellos ya no estaban bajo dicha tutela.

 

Parma y Toscana fueron cedidos por parte de Carlos III a los Habsburgo al ser coronado rey de Sicilia y Nápoles.

 

Sicilia se perdió tras la Guerra de Sucesión Española (1701-15) entre Felipe de Anjou y Carlos de Habsburgo, futuro emperador Carlos VI, cierto que tras la Guerra de Sucesión Polaca (1733-38), Felipe V logró recuperar en 1734 los reinos de Nápoles y Sicilia para su hijo Carlos (futuro Carlos III), pero éste tuvo que renunciar a los mismos en 1759 para poder reinar en España tras la muerte de su hermano, Fernando VI, sin descendencia.

 

Austria y Tirol fueron cedidas por Carlos I a su hermano Fernando I en 1520 y 1522 respectivamente.

 

Sobre el Ducado de Borgoña nunca llegó a gobernar un monarca hispánico, aunque sí se mantuvo el título de Duque de Borgoña por el prestigio que le otorgaba a su titular ser el Gran Maestre de la Orden del Toisón de Oro. El emperador llegó a renunciar explícitamente al gobierno del ducado (Paz de Cambrai, 1529) pero no al título.

 

Con respecto al Franco Condado, o Borgoña moderno, fue cedido a Francia tras el Tratado de Nimega de 1679.

 

Flandes y Brabante se perderán definitivamente tras la Guerra de Sucesión Española (1701-15).

 

Sin embargo, a pesar de la alta representación de territorios vinculados a la monarquía hispánica en este escudo, hay ausencias notables que, sin embargo, sí aparecen en otros escudos de armas completos:

 

Reino de Navarra (cadenas de oro sobre gules), que no aparecerá en un escudo de armas completo en moneda hispánica desde los escudos de Carlos I acuñados en la península (10), o los medio ducados de dicho monarca acuñados en Nápoles (11), hasta que reaparezca con la amonedación de José Bonaparte (12) y más tarde con la peseta en 1869 (13).

(10) Escudo de Carlos I, Sevilla.

(11) Medio ducado de Carlos V, Nápoles.

(12) 20 reales José I, Madrid. 1812.

(13) 5 pesetas Gobierno Provisional, Madrid. 1869.

Nápoles (partido: primero fajado de ocho piezas de gules y plata; segundo cruz de oro sobre campo de plata) y el Milanesado (Escudo cuartelado: al primero y al cuarto, de oro, un águila exployada de sable, lampasada de gules y coronada de oro; y al segundo y al tercero, de plata, un Biscione de azur, coronado de oro, comiendo a una persona en su color), serán los grandes olvidados en la Pragmática de la Nueva Estampa. Sí aparecerán en acuñaciones napolitanas o milanesas, en escudos completos tan bonitos como los filipos de Milán (14) o los medios ducados napolitanos (15).

(14) Filipo de Milán de Felipe IV, Milán. 1657.

(15) Medio ducado de Felipe II, Nápoles.

Portugal (de plata y cinco escudetes en azur puestos en cruz con cinco bezantes o dineros en plata puestos en sotuer, bordura de gules con siete castillos de oro) no aparece desde 1685, a pesar de que Carlos II reconoció la independencia del reino vecino en el Tratado de Lisboa de 1668, y que realmente, de facto, se habían independizado en 1640.

 

Inglaterra (de gules tres leones de oro, lampasados y armados de azur) y Francia (un campo de azur tres flores de lis de oro puestas dos y una) sólo aparecerán durante el tiempo en que Felipe II fue rey consorte de dichos territorios, antes de la muerte de María Tudor, en acuñaciones napolitanas e inglesas (16) (17).

(16) Medio ducado de Felipe II, Nápoles.

(17) Chelín de Felipe II y María Tudor. 1555.

Desglose heráldico hecho por D.Vicente Castañeda y Alcocer (de la Real Academia de la Historia): “escudo Partido de uno y Cortado de dos. primer cuartel, de oro y cuatro palos de gules, que es de Aragón moderno; partido y flanqueado, jefe y puntas de oro y cuatro palos de gules, flancos de plata y un águila de sable, coronada de oro, picada y membrada de gules, que es de Sicilia. El segundo de gules y una faja de plata, que es de Austria moderno; partido de azur, sembrado de flores de lis de oro y bordura camponada, cantonada de plata y gules, que es de Borgoña moderno. El tercero, de oro y seis flores de lis de azur (distribuidas de arriba a abajo, una, dos, dos y una), que es del ducado de Parma. El cuarto, de oro y cinco roeles de gules (distribuidos en el campo de arriba a abajo, dos, dos y uno), untortillo de azur en jefe cargado de tres flores de lis de oro, que son las Armas del ducado de Toscana. El quinto, bandado de oro y de azur con bordura de gules, que es el antiguo de Borgoña. El sexto, de sable y un león de oro, coronado de lo mismo, lenguado y armado de gules, que es de Brabante.

Entado en punta de oro y un león de sable, lenguado y armado de gules, que es de Flandes; partido de plata y un águila de gules, coronada, picada y membrada de oro, cargado el pecho de un creciente trebolado de lo mismo, que es del Tirol.

Sobre el todo, escudo contracuartelado; primero y cuarto de gules, y un castillo de oro, almenado de tres almenas, con tres homenajes, el de en medio mayor y cada homenaje también con tres almenas, mamposteado de sable y aclarado de azur, que es de Castilla; segundo y tercer cuartel, de plata y un león de gules, coronado de oro, lenguado y armado de lo mismo, que es de León; entado en punta de plata y una granada al natural, rajada de gules, tallada y hojada de dos hojas de sinople, que es de Granada.

Sobre el todo del todo, escusón de azur, con tres flores de lis de Oro, que es Francia (Borbón), y la bordura de gules, que es de Anjou”.

 

CASILLAS ROLLÓN, Antonio, “Medina del Campo 1497: análisis de la reforma monetaria de los Reyes Católicos”, en MUÑOZ SERRULLA,

María Teresa (Coord.), Estudios de Historia Monetaria (II), Ab Initio, Núm. Extraord. 2

(2012), pp. 57-89, disponible en www.ab-initio.es

 

CASTAÑEDA Y ALCOVER, Vicente, “Arte del Blasón. Manual de Heráldica”, Madrid: Ediciones Hidalguía. 3ª Edición. 1954.

 

CAYÓN, Adolfo, Clemente y Juan, “Las Monedas Españolas. Volumen I. Del Tremis al euro. Edades Antigua y Moderna (I)”, Madrid: Editorial Cayón-Jano SL, 2005.

 

HERRERA, Adolfo, “El Duro”, Madrid: Editorial Jano SL (Juan R. Cayón), 1991. 

 

MOLAS, P., BADA, J., ESCARTIN, F., SÁNCHEZ MARCOS, V. y MARTÍNEZ, M.A., “Manual de Historia Moderna”, Barcelona: Editorial Ariel, SA, 1993.

 

MURRAY, Glenn, “Casa de Moneda de Madrid: cantidades acuñadas y ensayadores, 1614-1868. En conmemoración del 400 aniversario de su fundación en 1614”. Segovia: Asociación Amigos de la Casa de La Moneda de Segovia. 2014.

 

PÉREZ SINDREU, Francisco de Paula, “La Casa de la Moneda de Sevilla. Su Historia”, Sevilla: Editorial de la Universidad de Sevilla, 1992.

 

 

www.administraciondigital.es

 

corveracolecciones.com

 

Catálogo de los reales de a 8 columnarios

 

numismaticodigital.com

 

heraldicahispanica.com

 

blogdeheraldica

 

Las fotos de las monedas pertenecen a las plataformas sixbid.com y acsearh.info (gracias), los dibujos de los escudos son de elaboración propia.

 

Artículo publicado en la revista numismático digital: enlace.

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